Cómo hablar de ESI con las familias sin desatar una batalla campal

Se vienen las reuniones de inicio de año, y en este ciclo escolar van a ser realmente claves. Por un lado porque hay cambios en las curriculas en algunos distritos como CABA, y por otro lado porque habrá que hacer malabares en el abordaje de la ESI.

La primera reunión de familias del año suele ser casi un ritual educativo.Es el momento en que docentes y directivos intentan sentar las bases de lo que se realizará en el año, de la convivencia escolar y, por supuesto, surgen esos temas espinosos que generan debates acalorados. Uno de ellos la implementación de la Educación Sexual Integral (ESI).

Sabemos que algunas familias llegan con dudas, prejuicios y, a veces, con objeciones bastante firmes. Este año escucharemos más que nunca que la ESI «es ideología de género», o que si con su implementación se «está promoviendo la pedofilia»… Para que la reunión no termine en una escena digna de una batalla de Juego de Tronos, te dejo cinco sugerencias para abordar la ESI con claridad, tranquilidad y un toque de estrategia.

Antes de cualquier debate, es clave recordar que la ESI no es una ocurrencia moderna ni una «agenda oculta», sino un derecho garantizado por la Ley 26.150, sancionada en 2006. Esta ley establece que todos los niveles educativos deben incluir contenidos de ESI, con perspectiva integral y científica. Y en el caso de CABA, que ha sacado este terrible Reglamento Escolar, se le puede agregar su propia Constitución donde hablan de género, de respeto a los derechos y otras tantas cosas. Te dejo el link a un resumen de artículos que armé AQUÍ.

Un buen truco: tener impresas algunas copias de la ley o mostrarla en pantalla. Nada como un poco de normativa para despejar dudas.

La ESI no «adoctrina» ni «confunde» a los niños. No se trata de «enseñarles a ser» algo, sino de brindarles herramientas para conocer su cuerpo, prevenir abusos y respetar la diversidad.

Ejemplo concreto: cuando en nivel inicial hablamos del «cuerpo como propio» y de «no guardar secretos que incomoden», no estamos metiendo ideología, estamos previniendo situaciones de abuso. Y si en secundaria se abordan los múltiples tipos de familias, no se está «imponiendo nada», sino mostrando la realidad que los propios estudiantes viven.

Te comparto aquí este episodio del podcast que hice algunos años atrás donde te comparto los mitos más recurrentes respecto a la ESI

Algunas familias creen que la ESI les quita protagonismo en la educación de sus hijos e hijas. Nada más lejos de la realidad: la escuela complementa, no reemplaza. Mientras la familia transmite valores personales, la escuela ofrece información basada en derechos,evidencia científica y mirada diversa.

Un buen punto aquí es recordar que la ESI incluye temas como el cuidado del cuerpo, la prevención de enfermedades y el respeto por la diversidad, aspectos que incluso las familias más reticentes valoran cuando se los presentan sin prejuicios.

No es lo mismo hablar de ESI en jardín que en secundaria, y eso en general está claro…pero no siempre. A veces, el miedo de las familias surge porque imaginan contenidos inadecuados para la edad de sus hijos. Aclarar qué se trabaja según la etapa escolar puede ayudar:

  • Nivel inicial: reconocer emociones, conocer el cuerpo, aprender a poner límites personales, prevenir situaciones de abuso, higiene personal, familias diversas.
  • Primaria: prevención del abuso, igualdad de género, valoración de la diversidad, ejercicio de los derechos, conocer y cuidar su propio cuerpo.
  • Secundaria: derechos sexuales y reproductivos, consentimiento, relaciones saludables, métodos anticonceptivos, ITS

Si alguien llega a la reunión con la intención de «denunciar la imposición de la ideología de género», es fácil caer en el enfrentamiento. Pero en lugar de debatir con intensidad, una buena estrategia es escuchar y responder con datos. Preguntas como «¿Qué es lo que más te preocupa de la ESI?» pueden ayudar a entender de dónde vienen los temores y a dar respuestas adecuadas.

Recordemos que la ESI es un derecho y que la escuela es un espacio donde los estudiantes tienen que recibir herramientas para vivir con autonomía y respeto.

La primera reunión de familias puede ser desafiante, pero con información clara, ejemplos concretos y una actitud abierta al diálogo, podemos convertirla en una oportunidad para construir acuerdos. Y si todo falla, siempre queda la estrategia infalible: el mate en la mesa y una buena cuota de paciencia para escucharles en una entrevista personal.

¿Vos qué opinás? ¿Cómo vas a manejar el tema?

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